Nuestros mensajes dominicales han sido sobre la adoración como nuestra respuesta de la leal devoción a la autovelación de Dios. Debido a que la adoración es nuestra respuesta a la graciosa iniciativa de Dios, cada vez que nos acercamos al Señor, recordamos que él es quien nos ha buscado primero. Cuando llegamos a nuestro último mensaje en la serie, lea los capítulos de Apocalipsis 4 y 5 para atrapar una visión de la gloria de Dios.