La Espera

Esperar no siempre es divertido. Para aquellos de nosotros que tendemos a ser impacientes, esperar a veces parece un castigo. En la narrativa bíblica, la espera está en el centro de nuestra esperanza escatológica. La espera es el corazón de la esperanza bíblica, y es cuando esperamos pacientemente en el Señor que alcanzamos lo que nuestra esperanza anhela (Romanos 8:25). Esperar es también el corazón del evangelio porque Cristo es a quien esperamos. En palabras de Isaías 25:9, llegará el día en que podremos decir: “He aquí, este es nuestro Dios; Le hemos esperado para que nos salve”. En esta temporada navideña, esperamos con ansias este nuevo capítulo de mayor fecundidad, pero sabemos que esto sólo sucederá cuando el Señor se haga presente para hacer lo que sólo él puede hacer: la Salvación. Nuestra actual serie navideña, “La Espera”, nos anima a permanecer fieles y esperanzados mientras Dios una vez más nos sorprende con su regalo de amor, nuestro Señor y Salvador Jesucristo.